Adiós al toreo limpio y largo del día 5, que se trocó en arrimón sin sentido, enganchones continuos y cornadas anunciadas, impropias de un matador consciente. Yo no lo entiendo.
Le reconozco, faltaría más, valores superiores al resto de los matadores. Con una cornada seria no hizo un aspaviento (recordemos el esguince de mi admirado Cid para posibles comparaciones) y tiene un valor sobrenatural. Pero, ¡leche!, ¿qué sería de este chico si matara la de Miura, Palha, Victorino o cualquier otra ganadería de ese corte?
Hoy no me ha gustado. Nada. No me interesa esa tauromaquia. Todos sabemos que cuando alguien lleva un tiempo viendo toros y ha presenciado unas pocas cogidas, no es que se vuelva insensible, pero sí interioriza que la sangre es parte de esto. Hoy he sufrido bastante con este tío, como hacía mucho que no sufría y creo que sin necesidad. Las cogidas se presentían, eran evidentes, y él se quedaba ahí parado, impertérrito, ante la posibilidad cierta de la cornada. Habrá a quien le guste, supongo que la prueba son esas tres orejas. A mí no.
Todo lo de arriba es de Manon, estoy de acuerdo al 100%. A mí tampoco me gusta este tipo de tauromaquia.
Foto: Silvia (ToroAlcarria)
1 comentario:
De acuerdo con las sensaciones. Es indudable que el señor Jose Tomas es un grande del toreo, pero eso no implica que haya que aclamarle incluso en faenas suicidas y faltas de plasticidad y profundidad torera.
Madrid tiene un problema con este señor , me atrevo a decirlo con todo el respeto a las Ventas, y es que cada vez se ponga la montera en este ruedo saldra por la puerta grande, haga lo que haga, triste pero cierto...
Un saludo a todos.
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