viernes, 23 de abril de 2010

Taurodelta consiente las largas filas

Como todos los años vemos la desagradable escena de personas durmiendo debajo de las taquillas de la plaza de toros de Las Ventas. Lo de siempre. Unos se han aprendido que así se hace dinero fácil, esperan dos noches al raso para que en el momento oportuno le endosen el fajo correspondiente y así ceder el puesto. Muchos son reventas, que sin esconderse de nada ni nadie vociferan pidiendo dos de sol y dos del 10 bajo.

La tecnología avanza para todos menos para evitar estas escenas. Podemos mirar en tiempo real el tiempo en París, Estocolmo, Bruselas y Madrid. Se ha descifrado el ADN completo de personas. Salen televisiones e impresoras en 3D. Tenemos una estación espacial y un sin fin de avances para a la hora de optar a un abono... dormir 2 noches al raso no te las quita nadie. ¿Por qué no se crea un lista con todos los interesados y se hace un sorteo? El sorteo de "quintos" se hacía así, para entrar en algún colegio se hace por puntos, para optar a una entrada de fútbol en alguna final por número de socio (número de DNI), algo más justo que iguale las posibilidades de RICOS Y POBRES, porque el que tiene pasta tiene abono, el que no a pasar calamidades como toda la vida de Dios. Soluciones existen, otra cosa es tener la valentía, la preocupación y las ganas de llevarlas a cabo.

Pero ¿para qué se va a preocupar la empresa de tratar de evitar esto? De 23.727 localidades 19.721 son abonados, de los cuales 2.325 son reservados para mayores de 65 años y jóvenes. Si es que se la trae al fresco, ¡la caja está hecha!. Además, en un año en el que la crisis aún está presente, en el que tenemos un índice de paro de casi el 20% de la población, y sobre todo con la mierda de feria que han preparado, leo que el abono de San isidro registra la mayor renovación de los últimos años ¿no entiendo nada?.

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